«Saber aligerar es una cuestión mental y una forma de vivir, incisiva y fluida al mismo tiempo, que seguramente provoca sólo cosas bonitas», comenta Finessi en su editorial. Los estímulos y las interpretaciones sobre este tema son numerosos, procedentes de los distintos territorios en los que se mueve la creatividad, y se explican, como siempre, como una voz «fuera del coro». Se pasa de los dibujos de Lisa Ponti, de rasgos ligeros e inmediatos, a las miradas explicadas por las fotos de Rinko Kawauchi, elegidos siguiendo un hilo que es su saber hablar con sencillez. Entre las páginas de Inventario emergen los «Absolutos», obras que han cambiado nuestra vida, en este caso los mapas de Wim Delvoye, seguidos por un repaso de los topes de puerta, objetos sencillos en los que se encuentra la esencia del diseño, en un repertorio con textos y dibujos de Giulio Iacchetti. El inventario por autores continúa con Ugo La Pietra, investigador inagotable, «músico del proyecto, que trasforma el ruido en sonido y enseña que ‘habitar’ no significa solo usar el espacio, sino amarlo». Las instantáneas de Bagdad de Roman Ondák se suceden a los objetos que han salido de escena, seleccionados por Tobias Putrih; para la columna «Los nuevos maestros», el japonés Tokujin Yoshioka dialoga con Marco Romanelli y la columna «Los mitos de hoy» explica el reduccionismo formal del belga Maarten Van Severen. En la portada, una colección de velas, ya protagonistas de la muestra ‘Hacer lumbre. Velas entre arte y diseño’, organizada en el Museo Poldi Pezzoli de Milán del 5 de abril al 21 de mayo de 2012, proyecto de exposición a cargo de Inventario y promovido por Foscarini, presentado durante el Salón del Mueble 2012. La lámparas de Foscarini, en este caso Chouchin y Magneto, aparecen solo en la apertura y el cierre del número según la interpretación del fotógrafo Emmanuel Mathez que nos sumerge en la atmósfera onírica de una película.